lunes, 28 de junio de 2010

Señora


Cuando de veras se quiere el miedo es tu carcelero,
y el corazón se te muere si no te dicen te quiero.
Y cualquier cosa te hiere como a mí me esta pasando,
que me despierto llorando con temblores de agonía,
porque tus ojos, mi vía, y ese color de tu pelo
aún dormía me dan celos, gitano, gitano, del alma mía.
Miedo, tengo miedo, miedo de quererte.
Miedo, tengo miedo, miedo de perderte.
Sueño noche y día que sin ti me quedo.
Tengo, vida mía, miedo, mucho miedo.
Tiemblo de verme contigo y tiemblo si no te veo.
Este queré es un castigo, castigo que yo deseo...

Pienso, y recuerdo a todos esos amores perdidos a consecuencia del amargo MIEDO.
Cuando de verdad nos importa una persona este sentimiento aflora, junto con muchos otros,
 y se instala en nosotros para producirnos esos momentos de dolorosa felicidad.
Quizás sea inevitable que el querer vaya ligado con el temor a perder a la persona querida
pero es triste que muchas veces sea precisamente este sentemiento de inseguridad
 el motivo final de la perdida.

Esta canción fue uno de los primeros éxitos de esa gran astista que de grande es
"la más grande". Rocío Jurado, a la que con mil cariños va dedicado el post de hoy.
                                                                               

                                                                                     "El pecado de Eva"

viernes, 18 de junio de 2010

Las palabras del corazón...


"Las lágrimas son las palabras del corazón que la boca no puede decir."

Una frase preciosa, ¿verdad?.
Lo mismo pense yo la primera vez que la leí pero... ¿qué no puede o qué no quiere?
Dudo por propia experiencia, porque alguien a quien constantemente el corazón
 le grita y la boca le calla ya ha llorado las suficientes lágrimas como para dudar.
Y dudo porque hay bocas que callan para no hacer sufrir a más corazones.
Uno se ahoga en su propia amargura para no lastimar a quien quiere. 

                                                                                  "El pecado de Eva"

domingo, 6 de junio de 2010

La copla



Pilar Boyero

Ella, la misma que provoca celos y envidia en unos,
hace crecer amor y pasión en otros.

Ella, la que nunca pasa desapercibida,
por ser decidida y luchar por la libertad.

Ella, la que cuenta con el favor de los que la adoran
y logran que roce el cielo con la punta de los dedos.

Ella, la que resiste cual copla, fuerte y segura,
luchando por ser oída frente a los que desearían verla hundida.

Ella, la que con esa voz divina nos acaricia el alma,
robándonos un pedacito de corazón con cada canción.

Pilar, la única.


                                                   " El pecado de Eva"